Todo el mundo conoce el trigo ya que de él obtenemos la harina con la cual se elabora el pan, la pasta, pasteles, etc. pero pocos saben que si lo germinamos obtenemos un alimento con unas propiedades increíbles.
Es un alimento barato, fácilmente preparable por todo el mundo y con un sinfín de nutrientes.
Hay gente que lo toma en forma de zumo (jugo) En algunos países se vende ya licuado o en comprimidos (preguntad en vuestro herbolario)
Elaboración del trigo germinado
- Dejaremos dos cucharadas soperas de semilla de trigo (el grano del trigo), bien lavado en remojo (con agua templada) durante 24 horas, tapado con un paño (el frío dificulta la germinación)
- Luego se extiende el trigo sobre un plato. Podemos aclararlo un par de veces al día con agua templada. La idea es que esté siempre ligeramente húmedo. Demasiada humedad pudre el grano y la falta de agua lo reseca y tampoco germina.
- Siempre tapado con un paño conseguimos que no se llene de polvo, no le caigan bichitos y que la semilla encuentre el calorcillo ideal para germinar más rápido.
- En unos cuatro o cinco días, depende de las condiciones ambientales, podemos tener nuestro germinado.
- Para comerlos es importante que no tengan más de 4 ó 5 centímetros ya que sino se vuelven demasiado fibrosos y quedan muy duros.
- Una vez alcanza esa medida adecuada lo más conveniente es ponerlos en la nevera (refrigerador o friser) ya que así se conservar y se detiene su crecimiento.
Propiedades del trigo germinado
El trigo germinado es muy recomendable en casos de desmineralización, personas mal nutridas, fatiga, anemia, crecimiento, embarazo, lactancia o convalecencia de cualquier enfermedad.
La verdad es que suele ir muy bien en muchas enfermedades ya que en la mayoría de los casos suele haber alguna carencia nutricional.
Las personas que lo toman durante tiempo suelen sentirse mucho mejor.
La germinación del trigo favorece la predigestión de las lectinas, que son unos nutrientes del trigo responsables de ciertos tipos de alergias al trigo que sufren algunas personas.
El trigo germinado se puede utilizar de varias formas
- Como germinado para añadir, por ejemplo, a las ensaladas.
- Si lo trituramos y secamos obtenemos una harina con la que podemos hacer pan, galletas, bases de pizzas, etc.
- Para obtener zumo del germinado (hierba o pasto de trigo) El modo más eficaz es molerlo en un mortero (no en una licuadora o máquina de hacer jugos ya que el germinado es demasiado pequeño para la máquina) y luego exprimir el germinado triturado con una gasa. Una cucharadita al día es suficiente.
Información nutricional del trigo germinado (por 100 g.)
Las enzimas que hasta este momento habían permanecido en estado latente se vuelven activas y empiezan a descomponer las proteínas, grasas, e hidratos de carbono, para que nuestras células puedan asimilar esos nutrientes de un modo más eficaz.
La germinación incrementa también de un modo considerable los nutrientes del trigo.
- Como ejemplo diremos que
- El grupo de vitamina B y los ácidos graso aumentan considerablemente.
- La vitamina C puede aumentar más de 500 veces y la vitamina E se puede ver triplicada en apenas cuatro días.
- El Fósforo pasa de 420 mg, por cada 100 gramos en grano, a 1050 mg. una vez germinado.
- El Magnesio pasa de 130 a 330 mg. y el Calcio de 15 mg. a 70 mg. con el trigo germinado.
El trigo germinado es un buen aporte para nuestro organismo de minerales como el Magnesio, Calcio, Potasio, Azufre, Fluor, Silicio, Zinc, Manganeso, etc. y de vitaminas como las del grupo B, la C y la E.
¿Sabías que el trigo germinado…?
Su sabor, ligeramente dulzón, es muy agradable.
Hemos de recordar que aunque en su germinación suele desaparecer el gluten es conveniente que no lo tomen los celíacos ya que siempre pueden quedar restos.
En caso de celiaquía, consultar siempre con el médico o especialista.